Los problemas ambientales que están a la base del cambio climático que estamos viviendo hace un buen tiempo, han hecho de la educación ambiental una herramienta fundamental para generar conciencia ecológica en  las poblaciones de todo el mundo.

Si bien, desde hace varias décadas, se trabaja con intensidad para conseguir acuerdos y políticas internacionales, que ayuden a preservar el medio ambiente y a frenar su deterioro, los cambios  más urgentes y necesarios se evidencian  a través de un trabajo en colaboración con otros, con quienes se comparte la misma sensibilidad, sumando iniciativas que se sostengan en el tiempo y que impacten en nuestra interacción social, comunitaria.

Los  primeros educadores ambientales son los padres, luego las escuelas y  los profesores de aula; en estos espacios pedagógicos  los y las estudiantes,  a través de variadas estrategias,  vivenciarán los problemas ambientales y sus posibles soluciones, conocerán la forma de valorar, respetar y conservar la casa común. Mediante estos ambientes de aprendizaje, toda la comunidad educativa asumirá una actitud responsable de su conducta ante el entorno que lo rodea.

Para la comunidad educativa de la escuela Rosita O´Higgins, el desarrollo de la conciencia ecológica  es un proceso sistémico, que partiendo del conocimiento reflexivo y crítico de la realidad biofísica, social, política, económica y cultural,  permite al niño, niña y joven comprender las relaciones de interdependencia con su entorno, para que con la apropiación de la realidad concreta, se puedan generar en  ellos y ellas ,  en su comunidad, actitudes de valoración y respeto por el medio ambiente. En este sentido,  nuestro sello ecológico  se encuentra intrínsecamente ligado a los valores institucionales, aptitudes y actitudes que sensibilizan al estudiante con su medio ambiente y  con la problemática que lo afecta, dándole así la posibilidad de modificarla, conservarla y preservarla desde su formación inicial.

Creemos profundamente que una educación valórica, integral, dialogante, empática, motivadora para todos y todas, permitirá formar un niño o joven amante de la vida, respetuoso/a y tolerante con los y las demás, solidario/a, justo/a, capaz de aprender y aplicar sus saberes fundamentales para cuidar la vida y el medio ambiente, consolidando una excelencia pedagógica, que le permita satisfacer sus intereses y expectativas, proyectándose como un/a ciudadano/a que ayuda a construir un mundo mejor.

Uno de los objetivos que nos hemos propuesto como futura escuela ecológica es que nuestros niños y niñas, comprendan la compleja naturaleza del medio ambiente. La tierra nos necesita, las familias nos necesitan, por eso hemos desarrollado discusiones y conversaciones para implementar acciones y convenios con organizaciones territoriales para desarrollar transferencia de conocimientos, con el fin de mejorar nuestras prácticas en el uso de los recursos, poniendo el foco en conceptos clave, como sustentabilidad, desarrollo sostenible, economía circular, biodiversidad, reciclaje, compostaje, eco desarrollo, eco consumo, consumo responsable y  comercio justo.

Entre las acciones de vinculación con el medio y de extensión a la comunidad, hoy se realizó la 1° Feria Educativa Medioambiental. Actividad  abierta a toda la comunidad cauquenina.

 En ella se dio a conocer  el trabajo desarrollado por los alumnos y alumnas en el aula, con sus docentes. En el semillero; bío huerto; arboleda con especies nativas; invernadero y lombricultura, estas actividades desarrolladas  por el coordinador del sello, profesor Paulo Cancino Cancino junto a  la Brigada Ecológica, y sus colaboradores Verónica Moraga Garrido y Víctor Ancamil Miranda.

Además estuvieron  presentes organizaciones del territorio vinculadas con la escuela, como Eco Pumalu, Eco Cauquenes, MAC (Movimiento de Acción comunitaria), AYEWÜN, CONAF, CFT San Agustín, entre otros invitados.

Finalmente, recordar que nuestro compromiso como escuela ecológica es cuidarnos y protegernos nosotros mismos y al planeta, cambiando comportamientos, a través de la acción colectiva y comunitaria, estableciendo  la relación entre el contexto social y ecológico, la conexión entre la práctica educativa y el compromiso social.